Por último, hay que hablar de una modalidad las mantas térmicas líquidas. Se trata de un producto químico que forma una película monomolecular sobre la superficie del agua. Es un líquido inocuo, que no altera a los otros productos químicos presentes en la piscina, ni daña la instalación, y tiene efectos similares a una manta solar convencional: aumenta la temperatura hasta 4 grados en un mes (es el plazo de duración de sus efectos), reduce la evaporación en un 50%, ahorra energía y agua. Se presenta en varios formatos que contienen el líquido y se echan a la piscina para que vayan liberándolo progresivamente. Debe renovarse mensualmente.

Ampliar la temporada y los horarios de los baños en nuestra instalación y minimizar la evaporación del agua son los principales beneficios que nos aporta la colocación de una manta térmica en nuestra piscina. Se produce también una mejora en el mantenimiento, todo ello, gracias a un sencillo y asequible sistema.

En primer lugar, es imprescindible distinguir entre manta y cubierta solar. La primera se extiende sobre la superficie del agua directamente, mientras las cubiertas son estructuras que se montan alrededor de la piscina y se sujetan con algún tipo de anclaje. Una manta solar es un cobertor formado por dos membranas de polietileno de 100 micrones, con una cámara de aire en el centro rellena de burbujas. Es un material de alta resistencia, ligero, con aditivos para contrarrestar los efectos de los rayos ultravioleta y que flota sobre la superficie debido a su baja densidad.

Su principal función es calentar (alrededor de los 4 grados) y mantener la temperatura del agua por efecto de los rayos solares. Pero, su uso tiene otros beneficios a tener en cuenta. Contribuye al ahorro en el consumo de agua (minimiza la evaporación) y de productos químicos para la conservación de la misma (evita que se ensucie la superficie). Pero, además, incide en la seguridad impidiendo que, en caso de caídas fortuitas, nadie pueda ahogarse (aguanta, el peso de hasta dos personas sin hundirse).

Fuente: Piscinas.com